
Estoy pasando una época un poco difícil, se siguen avecinando muchos cambios y con una niña pequeña son más pesados aún, pero ahí vamos, adaptándonos y superándonos ante lo que venga. Poco tiempo he podido dedicar al mundo blogueril y puede ser que siga siendo así.
Como os podéis imaginar... Celia avanza a pasos agigantados, se sienta fácilmente con apoyo en su espalda y gira su cuerpo tantas veces como quiera para todos lados y no tarda nada en ponerse boca abajo. También gira su mano en el aire y se le queda mirándo atónita. Carcajadas vienen y cracajadas van. Por encima de todo destaco lo risueña que es, sonríe mucho, ella misma os lo cuenta en esta foto:
Seis meses ya pedía una mención especial y de nuevo me puse a prueba con el arte de la repostería... decidí hacer un bizcocho de chocolate con piñones, lo de los piñones se me ocurrió unos segundos antes de meterlo al horno y la verdad le quedaron de fábula, (me gusta encontrar trocitos de frutos secos en los bizcochos). Si queréis, en otro momento pongo la receta del bizcocho. Se dejó comer de maravilla.