Sentido y sensibilidad 2008.

Mirando mis libros encontré Sentido y sensibilidad entre los que pienso llevarme cuando termine de mudarme. Sí, los grandes cambios siguen presentes pero hay cosas que no cambiaré, quiero seguir leyendo y rodearme de esos libros que me han dejado buenas sensaciones.
En medio de la lactancia y de tantísimos pañales (situación ecológica que estoy por resolver), me vi de nuevo disfrutando de la sensibilidad artística e impetuosa de Marianne y del razonamiento y serenidad de Elinor.
Disfruté de otra manera esta segunda lectura, la primera vez no me fijé en algunos detalles ni me recreé tanto en lo bellamente que está escrito, por algo será que recomiendan las relecturas.
Como sabía que la BBC había hecho una miniserie en el 2008 aproveché para verla.

Me gustó más esta miniserie que la película de Ang Lee de 1995, aunque creo que a la mayoría de la gente le gustó más la película. Pero no voy a caer en muchas comparaciones, cada producción tiene su estilo.
La miniserie es muy fiel a la obra de Jane Austen. Se compone de tres capítulos donde los escenarios y el vestuario son admirables y las actuaciones destacables, me encantó el elenco elegido aunque eché de menos a Greg Wise como Willoughby y a Alan Rickman como el coronel Brandon. Sin embargo Hugh Grant no se hizo extrañar, Edward Ferrars es tímido e incapaz de romper un compromiso aunque le amargue la vida, pero con Grant además es aburrido. Dan Stevens para mí estuvo mejor en el papel. Me gusta cuando en lugar de declararse a Elinor le regala un librito de flores.

Hay escenas muy logradas como la caída de Marianne en los acantilados. Pero me resultó deprimente la casita de campo donde tuvieron que mudarse, tan apartada en aquel valle. Tal vez tenga por explicación que así se refleja mejor el gran cambio que sufrieron las hermanas junto a su madre.

Como novedad se ve una escena con preámbulos al sexo que por supuesto no sale en el libro pero que Jane Austen da a entender.
Finalmente quería hablar de la pequeña Margarett, en el libro Austen apenas la menciona pero en las versiones llevadas a la pantalla se muestra mucho más y la historia gana chispa y humor con ella.
Acabo de enterarme que el libro Sentido y sensibilidad hace su 200 aniversario este año, buena coincidencia para esta entrada.