
En esta novela Jane Austen vuelve a hacer gala de su estilo perspicaz y de su ironía sobre la sociedad inglesa del siglo
XIX. Las descripciones psicológicas y los sentimientos de sus personajes son lo más destacado, sobre todo: el juicio y la emoción. Por cómo se desarrolla todo ello, debo decir que me ha gustado la historia, aunque creo que siempre me gustará más su obra
Orgullo y prejuicio.
Aquí podemos ver una vez más la esencia de la mujer y de cómo se desenvolvía en aquellos tiempos. El personaje que más me gustó fue el de Elinor Dashwood, su templanza, sus razonamientos y su lealtad, hicieron de ella una persona admirable durante todo el libro.
Las protagonistas son las hermanas Elinor y Marianne Dashwood, las cuales tienen temperamentos opuestos. Elinor, la mayor, con 19 años, representa el "sentido" y Marianne, que tiene 17, representa la "sensibilidad", viven con su hermana pequeña Margaret, y su madre, la señora Dashwood. Después de la muerte de su padre, el patrimonio familiar pasa a John Dashwood y su ambiciosa mujer, Fanny, al ser el único hijo varón de un primer matrimonio. Como consecuencia, la familia queda con casi nada y se muda a una casita en el campo que les ofrece un pariente. La novela sigue a las hermanas Dashwood en su nuevo hogar, donde experimentan tanto el romance como las desilusiones y las diferentes contrariedades que tendrán que superar en una sociedad llena de normas rígidas y centrada en los intereses económicos del matrimonio. Conocerán a tres hombres que serán decisivos en sus vidas: Edward Ferrars, Willoughby y el coronel Brandon.Antes de leer el libro vi la película, fue estrenada en 1995 por Ang Lee. Inevitablemente me imaginaba a los actores representando las

escenas y los diálogos, a veces lo quería evitar, Hugh Grant nunca me gustó mucho así que intenté ver a Edward Ferrars con otra fisonomía. Las interpretaciones que más sobresalieron fueron las de Emma Thompson (Elinor), Kate Winslet (Marianne) y Alan Rickman (coronel Brandon).
Por lo demás, bastante bien, me encantó la música dirigida por Patrick Doyle, el resto del elenco, el vestuario, la elegancia, las escenas. Fue una adaptación bastante fiel a lo que Jane Austen quiso expresar.
Para finalizar os dejo con dos párrafos del libro:
A veces las circunstancias del momento otorgan a las estimaciones de uno un valor más alto del que tienen en realidad; y en ocasiones esta obsequiosa condolencia mortificaba tanto a Elinor que pensaba que, para conseguir la paz, era más indispensable la buena educación que la buena voluntad.
A Elinor le había dolido más el arrebato que lo que de él se había derivado; pero los ojos del coronel Brandon, fijos en Marianne, denotaban que, de toda la escena, únicamente retenía la entrega, el corazón leal que era incapaz de tolerar el más mínimo desprecio infligido a su hermana.
Ahora continuaré con la lectura de Los Pilares de la Tierra, tiene muy buenas críticas. Hace tiempo intenté leerlo y lo había dejado, veamos entonces, puesto que aún estoy esperando a que me atrape.